“Mil onzas de oro son ciertamente una gran recompensa, y el cargo de primer ministro sin duda una elevada posición. Ahora bien, señor, ¿es que no ha visto al buey que se va a sacrificar a la espera de serlo en el templo real del estado? Se le cuida mucho y se le alimenta bien durante unos pocos años, y se le engalana con ricos brocados hasta que está listo para ser llevado al Gran Templo. Entonces, aunque con gusto se cambiaría por el más solitario de los cerdos, ¿acaso puede hacerlo? Así que… ¡fuera de aquí y rápido! No me insulte. Preferiría vagar y no hacer nada en un charco embarrado, pasármelo bien a mi gusto, antes que acabar sometido a las limitaciones que impondría el gobernante. Jamás aceptaría un cargo oficial, para así poder ser libre de proponerme mis propios fines”.
¿Cuál es la pregunta más importante que se ha hecho?
Los iniciados, los que lograron elevar el techo de la humanidad (Buda, Cristo, Lao Tse, Viracocha, Confucio, Sócrates), ¿nacieron con un potencial superior o lo alcanzaron siguiendo un camino?
Buena pregunta.
Leí todos los libros sagrados y viajé en busca de culturas iniciáticas: mayas, incas, aztecas, egipcios, zen..., para encontrarme con los guardianes de la sabiduría.
¿Y?
Todos me dijeron que el estado humano está para ser trascendido. Casarse, tener hijos y un trabajo sólo es el escenario. Y todos han bebido de un mismo manantial original.
¿En qué coinciden?
Hay cuatro principios (cada uno con sus cuatro pasos) que cada cultura ha llamado de forma distinta. Al primero yo lo he llamado: guerrero, mercader, sacerdote y mago.
¿Camino iniciático?
Sí. El guerrero lucha contra sí mismo, es la introspección. Después aprendes a negociar con la realidad, contigo mismo y con los demás (mercader). Luego se borran las barreras entre dentro y fuera (sacerdote), y la suma de los tres da el mago.
¿El segundo principio?
Trata de la jerarquía de planos del universo. No se puede trabajar desde lo físico para lograr algo físico. Lo físico está regido desde lo energético, y lo energético desde lo psíquico. El universo es mental.
Tercer principio.
Jerarquías de preguntas. Las preguntas no pueden ser caóticas, deben estar hechas en un orden si no quieres tropezar en ellas.
¿Qué preguntas?
Para conseguir algo en la vida la primera pregunta del occidental es cómo, y si no hallamos respuesta cerramos el tema: "No se cómo hacerlo". Pero hay dos preguntas antes que si respondes el sufismo dice que el universo te premia, del cómo ya no tienes que ocuparte tú.
Me está intrigando.
Primera pregunta: ¿desde dónde vas a hacerlo?, ¿desde qué paradigma? Si vas a hacer algo desde un paradigma que te dice que no se puede, no podrás. Entonces no renuncies, cambia el paradigma.
Ilumíneme.
No se trata de lo que tienes que alcanzar sino de lo que tienes que vaciarte. Hay algo que te obstaculiza a nivel mental y que no te permite alcanzar el resultado que quieres. Pero para saber desde dónde, necesitas saber adónde te diriges. ¿Adónde se dirige un occidental cuando quiere lograr algo?
¿?
Preparación, esfuerzo, estudio y trabajo. Los chamanes no conocen esos cuatro verbos, prefieren otros.
A saber...
Hay que aprender a polarizar la realidad, es decir, que todas tus fuerzas se dirijan de manera unificada a tu objetivo. Pero el ser humano trabaja con fuerzas divididas (quiero pero no debo, voy o no voy).
Más verbos.
Nombra la realidad que quieres. Tercer verbo: siente lo que quieres. Cuarto: entrama lo que quieres, aprende a leer señales que te dicen si estás en el camino correcto para conseguir lo que quieres. Quinto: evalúa lo que quieres.
¿Qué significa eso?
Hay cuatro estados de la mente que son cárceles: estado de lo posible, de lo imposible, de lo contingente ("a veces me sale y a veces no") y de lo necesario ("necesito esto"). Evaluar significa ver en qué estado estás para encontrar la puerta de salida.
Sexto:
Cuando sabes adónde te diriges, debes aprender a trabajar con tu energía - que es lo contrario al esfuerzo-para alcanzarlo. El séptimo verbo es casualizar, aprender a generar casualidades: si logras soñar tu realidad la logras realizar.
¿En sentido onírico o imaginativo?
No divida su energía: en ambos. En tus sueños está lo que vas a lograr. Hay que aprender a entrar en los sueños. Octavo: aprender a negociar con la realidad y negociar la realidad. Esto se aprende en las escuelas samuráis. Noveno: aprender a sexualizar la realidad, penetras donde quieres penetrar.
¿Alguna idea?
Sutil significa penetrante. Décimo: realizar la realidad. En las culturas iniciáticas la realidad no existe como algo previo, es algo que crear. Lo denso es el hijo bobo de lo sutil.
Tercer principio.
Jerarquía de preguntas: desde dónde, adónde y por dónde. Del cómo se ocupa el universo. Tú no sabes cómo se van a generar esas casualidades que te van abriendo las puertas de tu objetivo, tienes que estar atento. Eso te obliga a una presencia absoluta y, de paso, la vida se vuelve divertida.
Cuarto principio.
La realidad se genera de dentro afuera y de lo sutil a lo denso.
¿Cuáles son las trampas del camino?
Hay que poner mucha atención en lo que decimos porque ahí están los desvíos que luego encontraremos en la realidad. La realidad se inicia en la palabra. Lo que digas será hecho, ojo con lo que dices.
Qué responsabilidad.
Si dices "mañana voy a ir a buscar trabajo" el objetivo es buscar, no encontrar. Se trata de un estado de presencia superior. La realidad con la que chocamos viene de dentro.
Tras años de psicoanálisis y de estudio de las diferentes culturas iniciáticas, se fue en busca de la práctica. Asegura que es el único investigador que ha tenido el privilegio de formarse con los indios q´eros, herederos de la sabiduría inca. Dice que somos magos y que para poner en marcha nuestra magia debemos seguir el mapa que tienen en común las diferentes culturas. Es un placer oírle interpretar y relacionar pasajes del Vedanta, los Evangelios o los textos sufíes y desgranar la etimología de palabras esenciales. Tiene publicados varios libros (Casualizar:los once pasos de la magia; El otro camino; Lluvia seca) y ofrece cursos y conferencias (edipo. org). A finales de octubre estará en Barcelona.
Li ha costat fer el pas i presentar-se a les eleccions?
A nivell personal és un pas que jo esperava no haver de fer. Esperava que hi hagués altra gent que es posés al capdavant. Però fa anys que treballàvem perquè hi hagués una candidatura que tingui com a objectiu proclamar la independència des del Parlament de Catalunya, i a hores d'ara no en sortia cap. I nosaltres el que no podíem fer era no presentar-nos. Estem a quatre dies de les eleccions, que es podrien convocar qualsevol matí d'aquests, i havíem de fer el pas. Jo hauria preferit que sortís un altre cap de llista per Girona, però no hi ha sigut.
Josep Maria Terricabras els va dir que no?
És cert que hi vam parlar, però ell ha preferit esperar, i ho hem de respectar.
Es presenta per Girona però el cap de cartell és vostè. Això és el primer cop que passa. Quan Joaquim Nadal, un altre gironí, va ser presidenciable pel PSC, va anar a la llista de Barcelona, per exemple.
És que en aquest país hi ha molts polítics covards. Jo visc a Puigcerdà i em toca presentar-me per Girona. La meva responsabilitat és presentar-me pel territori on visc. I on penso continuar vivint passi el que passi. Si vostè creu que fent-ho així trenquem motllos, potser sí. Ja n'hem trencat alguns i en trencarem més.
Quin component de ressentiment amb ERC hi ha en el fet que es presenti?
Cap ni un. No he tingut mai cap ressentiment cap a ERC. Vaig arribar a la conclusió racional que s'estaven equivocant i vaig decidir plegar. Res més.
S'ha tornat a veure amb Joan Puigcercós?
No. I no tindria cap sentit. Ells porten la seva estratègia i jo la meva. No em sentirà parlar malament d'ERC. Ells han de fer la seva vida i jo la nostra. ERC té una llarga història i ha tingut moments molt bons. I que jo cregui que ara ho estan fent molt malament, si tenen l'aval dels seus militants, jo no n'he de fer res.
ERC s'equivoca?
Crec que sí. Estant al govern ja vaig dir que aquest Estatut era un desastre. I insistir en el tripartit ha estat un greu error, i la prova és la situació en què està el país.
Vostè ha arribat a dir que en el seu currículum mai posaria que va ser conseller del govern...
Això ve de quan jo era al govern, quan feia conya amb el conseller Castells, que el tenia al costat a les reunions de govern, dient-li que jo mai posaria al currículum que havia estat conseller d'aquell govern. Recordi que vaig ser jo, quan era al govern, que vaig dir que allò era el Dragon Khan. No ho vaig dir a posteriori. Ho vaig dir essent-hi. Per això puc fer broma dient això del currículum.
Com veu el govern?
Atrapat. Han triat un camí que ha portat cap a un precipici, i ara costa molt de recular. Estan en una situació d'absoluta indefinició. Els presumptes federalistes ja saben que això és una entelèquia; els encaixistes, també...
El principal partit de govern, el PSC, ha de fer un gir?
Tothom sap que el PSC, com a tal, no existeix. És una ficció més de la política catalana. Jordi Pujol va fer veure que teníem un govern, i el PSC fa veure que són diferents del PSOE; uns altres fan veure que són independentistes... La política catalana és una ficció: no hi ha recursos, no hi ha competències... I ara, amb el capítol de l'Estatut, totes les fal·làcies d'aquests trenta anys han quedat al descobert. Tothom ha quedat atrapat en el seu propi discurs. Tothom és víctima de la seva pròpia ficció. I el més patètic de tots aquests partits és que feia quatre anys que sabien que això passaria i no han estat fent res.
I arriben vostès per arreglar-ho tot? Des del seu punt de vista, es presenten, doncs, en el millor moment?
Ens presentem en el pitjor moment per al país. I amb una gran crisi econòmica. Un país amb l'autoestima per terra i que veu guanyar la roja i no sap com prendre-s'ho. Hi ha qui es consola pensant que hi ha jugadors del Barça. Quin país! Forma part de l'esquizofrènia de la societat catalana.
Vostè anava, és clar, a favor d'Holanda.
Jo sempre vaig amb els que van contra Espanya. I no m'he de justificar. Els espanyols ho tenen fàcil, però nosaltres no.
Joan Carretero, fotografia a mitjan d'aquesta setmana a Puigcerdà. Foto: XEVI XIRGO.
I aquest pensament, el de Reagrupament, té espai electoral?
És possible que no en tingui cap. I que la societat catalana, malgrat estar com està, encara aposti pel mateix. Però jo sempre he dit que els ciutadans tenen raó. I encara que patim una pallissa, tenen raó. Ho dic abans de les eleccions i ho diré després. Si nosaltres no fem res de bo, continuaré dient que els electors tenen raó. Si els ciutadans de Catalunya volen el mateix, ni que sigui amb proporcions diferents, és que ho volen.
Què ofereixen de diferent, vostès?
Actes de sobirania i d'autodeterminació. Que allò que hàgim de decidir ho decidim al Parlament. I punt.
I vostè creu que la societat catalana va cap aquí. És dels que interpreten que la manifestació de dissabte passat volia dir això?
Va ser un símptoma que hi ha molta gent que no se sent a gust amb la situació, que no se sent còmoda. Hi ha gent que se sent estafada. I surten i criden que no hi estan d'acord. Però només amb manifestacions un país no avança. Si això no té una translació a la composició política del Parlament, no servirà de res. Podrem dir allò de "Jo hi era", que és molt català, però no servirà de res. D'altra banda, tinguem en compte que a Madrid ja s'hi han acostumat, que fem manifestacions de tant en tant. I a ells els és igual que siguem un o dos milions. Saben que al cap d'uns dies tots fem vida normal i que no passa res. A Madrid només els pot impressionar una majoria parlamentària.
Llavors...
Jo fa molt temps que vaig pronosticar que aquest procés acabaria amb un Estatut pitjor que l'anterior, i ha estat així. Estem pitjor que amb l'Estatut vell. I els partits estan atrapats. Nosaltres som una alternativa absolutament diferent.
Però si al Parlament hi ha finalment una unitat, no troba que serà diferent?
Unitat? Una unitat per fer què? Tots tenen objectius diferents, i no estan d'acord ni en el què ni en el com. Les expressions d'unitat que hi pugui haver són molt boniques, però no serviran de res.
Algú hauria de convocar un referèndum?
Un referèndum no serveix de res. La independència no vindrà per un referèndum. L'hem de proclamar i punt.
Les proclames similars històricament no han acabat bé.
Actualment, una proclama d'uns diputats elegits democràticament, en una Europa democràtica, té un altre valor. I internacionalment se'ns reconeixerà. Una altra cosa és que llavors hàgim de fer un referèndum, però serà després, no abans. Som ciutadans europeus com els altres, i ho tenim tot a favor. Una altra cosa és que tinguem por.
Els nostres dirigents tenen por?
Els dirigents i la ciutadania. Som fruit de la nostra història, i ho hem d'entendre. I hem d'entendre que hi ha una part de
por i una part de comoditat.
Però no s'entendria que després d'un milió i mig de persones al carrer tot quedés igual.
En alguns punts el seu discurs és molt semblant al que li hem sentit fer en algun moment a Joan Laporta, l'expresident del Barça, que ha arribat a dir que se sentia moralment reagrupat. Aniran finalment junts?
Fa mesos que dic que ell seria un molt bon cap de cartell. Però el nostre procés de maduració no té res a veure amb el seu. Nosaltres fa anys que hi treballem, i ell ha decidit anar a la política fa quatre dies. Nosaltres tenim full de ruta, programa electoral... I ara hi ha un procés dificultós fruit d'uns processos de maduració diferents. Si ell vol venir amb nosaltres, però, té la porta oberta de bat a bat.
Què els separa?
A hores d'ara, la diferència fonamental és la fórmula com ens hem de presentar. Nosaltres som algú, tenim personalitat jurídica, milers de persones que paguen unes quotes, i per això pensem en una coalició.
I ell, en el seu partit.
Sí. I aquest és un tema important que ara ens encalla. Però penso que és salvable.
Reagrupament pensa que seria una llàstima no arribar a cap acord amb Laporta?
Crec que seria un error per part de tots dos que no ens acabéssim entenent.
No hi ha un problema de personalismes?
No. És més: em sembla que he començat l'entrevista dient-li que si jo no vaig a les llistes estaria encantat.
Però vostès ja han tancat les llistes.
Ho tenim tot a punt per si hi ha eleccions. Tenim els deures fets. Com he dit sempre, esperem a tothom però no ens encantem per ningú. Per això si demà hi ha eleccions ja hi podem anar.
Fins quan la porta serà oberta?
Fins que els terminis ho permetin. Però també penso que els ciutadans tenen dret a saber amb temps, i no a darrera hora, quines són les seves opcions.
Llavors?
Hi ha processos que maduren. I, com en tots els processos, n'hi ha que maduren bé i n'hi ha que no. I forçar la màquina tampoc és mai bo.
Continua pensant que el president del Barça és més important que el president de la Generalitat?
Ara per ara, per desgràcia sí.
Llavors, potser s'hauria d'haver presentat per a president del Barça, ara que hi ha hagut eleccions, no?
El meu objectiu no és ser president de res. I, suposo que ja ho sap, per ser president del Barça s'han de tenir molts milions. I jo no els tinc.
Té alguna opinió formada sobre Sandro Rossell?
A Laporta se li ha de reconèixer que des del punt de vista esportiu ha estat fantàstic, i això no l'hi podrà treure ningú. Sandro Rossell és un meló per obrir.
Si vostès es presenten, les majories al Parlament poden ser encara més complicades?
Ara ja hi ha un tripartit, que es baralla cada dia. No estem en un país en què tot funcioni meravellosament. A les properes, és possible que no es necessitin coalicions. El Parlament el que ha de reflectir és la realitat d'un país, i si hi ha més o menys partits no té cap més importància.
I si vostès han de decidir, amb qui se sentiran més còmodes?
L'assemblea nostra va refermar que en cap cas entrarem en cap govern. Excepte, és clar, que fos un govern de proclamació de la independència.
Renuncien a influir?
Es pot influir sense ser-hi. Segurament que molt més que no pas essent-hi. I li dic una altra cosa: si nosaltres som decisius, el que no hi haurà és un tercer tripartit. No som equidistants.
Ja els festeja algú?
En absolut. Tothom fa veure que no existim. I si llavors existim formalment, és evident que ens hauran de saludar.
Quants diputats calculen que pot tenir Reagrupament?
Som conscients que podem fer zero diputats, però també que en podem fer uns quants. L'enquesta bona és la del dia de les eleccions.
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A pesar del colapso, nadie se ponía nervioso por no poder moverse ni avanzar; bastaba con estar ahí
Difícil sustraerse a la fuerza de los hechos. Hace falta estar ciego para no reconocer que el sábado sucedió en Barcelona algo realmente importante y en parte nuevo. El tiempo dirá cómo cuaja, pero que empezó algo, a estas horas, es ya evidente. Por ello, no es prematuro ahora, tras una manifestación que ha desbordado los pronósticos más optimistas, configurar una cartografía de algunas obviedades y evidenciar ciertas falacias. Empecemos por las obviedades:
Primera. ¿Cómo debe leerse la presencia de más de un millón de catalanes en la calle? Cada cual, aquí y en España, arrimará el ascua a su sardina, pero casi uno de cada cinco catalanes dedicó su segundo sábado de julio a manifestarse con un lema inequívoco: "Som una nació. Nosaltres decidim". Quienes estuvieron en la manifestación dijeron eso. No lo pedían ("queremos ser una nación"). No era un sentimiento ("nos sentimos una nación"). No era una idea ("perfectamente legítima", como pretende la sentencia, y como rebatió Francesc-Marc Álvaro).La portada de ayer en La Vanguardia confirmaba esta primera obviedad: "Catalunya sentencia". Pero un día antes la sentencia del Tribunal Constitucional ("intérprete supremo de la Constitución", según su ley orgánica) había afirmado que "la Constitución no conoce otra nación que la española". No hace falta haber estudiado lógica para saber que las dos proposiciones son radicalmente incompatibles. España tiene un problema: Catalunya se ha salido del guión.
Segunda. Se ha acabado la época del català emprenyat.El detonante de la manifestación, sin duda, fue el disgusto, el hartazgo y la indignación. Pero sólo el detonante. Se equivocan quienes interpretan el 10-J como una momentánea expresión de descontento, al estilo de las protestas contra la guerra de Iraq (o contra Renfe). Aquellas fueron manifestaciones eléctricas, atravesadas por una energía colectiva de rechazo. Pero todos, entonces, supieron que su gesto, con ser necesario, era, en el fondo, inútil: nadie esperaba que la guerra se parara (ni que Renfe funcionara: es imposible). Para aquellas manifestaciones vale lo que ayer dijo Sergi Pàmies: "La manifestación multitudinaria es un género perdedor". Pero sólo para aquellas. El sábado, el rechazo se expresó en positivo: "Som una nació". Por eso, a pesar del colapso, nadie se ponía nervioso por no poder moverse ni avanzar. Bastaba con estar ahí. Por cierto, ¡qué gran metáfora!: la manifestación sólo echó a andar cuando la cabecera institucional abandonó la calle.
Tercera. Ni un grito en favor del Estatut. Al contrario, uno recorrió toda la manifestación: in-inde-independència.Quien no sea sordo, pudo oírlo. Gran equivocación en España durante estos últimos meses: interpretar el Estatut como una ofensiva del independentismo. Era al contrario: los partidarios del Estatut todavía creían en España. Y son ellos los que han quedado desmentidos. Lo reconocía ayer Antoni Puigverd con tristeza: "Los moderados somos los grandes derrotados del TC". Hay que agradecer al TC su claridad: la puerta está cerrada, el modelo no da más de sí, se acabaron las medias tintas, el "sí, pero", el "un poco más", el "de otro modo". La arquitectura constitucional ya no permitirá ni renovar la pintura de las habitaciones. Sabido esto, todos, también CiU y PSC, deberían actuar en consecuencia.
Cuarta. La sentencia del TC es el acta de defunción definitiva del proyecto de una España plural y de cualquier tipo de aspiración incluso remotamente federalista.
El PSOE, si alguna vez estuvo por la faena, ha quedado inequívocamente desautorizado. O peor, porque un tufillo recorre toda la sentencia: la inspiración ideológica que se ha impuesto en ella coincide, en diagnóstico y en prescripción, con la de quienes, en su momento, a la derecha de UCD, rechazaron la Constitución. Ellos son los beneficiarios de esta sentencia póstuma: y están más vivos que nunca. De ahí el entusiasmo del PP por la sentencia.
Quinta. Òmnium Cultural ha recogido el premio a un prestigio cultivado durante décadas. Y, en estas horas, a pesar del cinismo de algunos dirigentes (como Iceta, poniendo en cuestión el genitivo plural), Òmnium representa, en nombre de casi mil quinientas asociaciones, lo mejor que tenemos: el impulso de la sociedad civil, el compromiso con la lengua, la cultura y el país. Y la confirmación, como hace tiempo que debería ser obvio, de que la política no la hacen sólo los llamados políticos. La "hora de la política" empezó el sábado.
Y, para acabar, algunas de las falacias. Circulan unas cuantas, y bastante graves, pero dos son escandalosas.
Primera. A pesar de que todo el Gobierno español y la cúpula del PSOE han insistido hasta la afonía, la del sábado no fue una manifestación contra el PP. Deben darse por aludidos también ellos. Que no se hagan los sordos. Que más de un millón de personas colapse Barcelona para afirmar que "som una nació", cosa con la que ellos no están de acuerdo, debería hacerles pensar. Ellos no defienden esta Catalunya. Que no se pongan una medalla que no es suya.
Segunda. Desde Zapatero hasta De la Vega y Chacón, se está propagando una mentira con mucha mala fe: el Estatut concede a Catalunya el mayor autogobierno que ha tenido nunca. Por favor, que vuelvan a la escuela y que estudien un poco de historia. Y que alguien del PSC les regale y les obligue a leer las crónicas de Jaume I, de Bernat Desclot y de Ramon Muntaner. O el soberbio libro de Joaquim Albareda, La guerra de sucesión de España:está en castellano, podrán entenderlo.
Los partidarios de la secesión superan por primera vez a quienes se oponen a ella
Si la reforma estatutaria tenía como pretensión mejorar o resolver el encaje de Catalunya en España, el balance final no puede ser más decepcionante. El tortuoso proceso de gestación del nuevo Estatut y el restrictivo fallo del Tribunal Constitucional sólo han servido para aumentar la desafección de los catalanes. Buena prueba de ello es que, por primera vez desde que el Instituto Noxa realiza encuestas para La Vanguardia, la pregunta sobre el voto en un hipotético referéndum independentista arroja un resultado favorable a la independencia de Catalunya. Nada menos que un 47% de los consultados afirma que votaría a favor, mientras que el 36% se opondría; un 3% lo haría en blanco; el 7% dice que no acudiría a votar, y el 5% no sabe todavía cuál sería su actitud.
Comparando estos datos con los de encuestas anteriores se advierte un vuelco enorme en las opiniones de los catalanes, que, sin duda, puede ser consecuencia de la coyuntura en la que se realizó la encuesta. Sin embargo, este vuelco podría interpretarse también como la acentuación de una tendencia que ya venía registrándose en los últimos años. Buen reflejo de ello es que la correlación del voto ha pasado de un apoyo del 30% a la independencia, en octubre del 2007, al 47%, ahora. Y paralelamente, las opiniones contrarias han caído del 50% que llegaron a suponer en noviembre del 2008 al 36% actual.Ficha técnica
Universo: población mayor de 18 años empadronada en municipios catalanes, con derechoavoto en elecciones autonómicas. Muestra: 1.000 entrevistas representativas de la población de Catalunya. Estratificación de la muestra: proporcional por tramos de población. Selección del individuo: por cuotas de sexo y edad. Error muestral: para un intervalo de confianza del 95,5% y para p=q=0,50, elmargen de error es de ±3,16% en el conjunto de Catalunya. Metodología: entrevista telefónica en el hogar con sistema Cati, con selección de teléfonos aleatoria gestionada automáticamente. Trabajo de campo: realizado entre los días 12 y 14 de julio.
